Me encontraba solo en la mesa de una cafetería, afanado en escribir versos.
Hay unos muchachos que hablan con desenfado. Mientras yo estoy sumergido
en mis afanes tormentosos.Se me acerca el grupo mas animoso.
Uno de los chicos deja caer comentarios que provocan mi resentimiento. Me vuelvo conmigo mismo en silencio.
Entonces el chico comienza a recitar unos versos. Compruebo, con secreta desilusión que son iguales a los mios. Y comienza nuestro extraño dialogo. Ya mas relajado.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario